En esta sesión trabajamos en acabar la F de la tapa, el recorte inicial del contorno y vaciar la zona hueca del cuerpo.

La F de la tapa

En la sesión anterior ya habíamos dejado la F muy cerca de estar acabada, lo que faltaba era terminar de definir bien algunas de las curvas y dejar las paredes interiores lo mas lisas posibles.
Recordemos que la idea es que vayan con una cenefa o binding, al igual que el contorno del cuerpo y la instalación de este requiere unas paredes muy bien terminadas.

Repasamos el dibujo buscado de la F a lápiz para saber donde llevarlo y trabajamos con una Dremel con un cabezal de lijado y después con unas limas para dedos japonesas que me parecieron una maravilla

Con esto quedamos satisfechos con la F de la tapa y pasamos a empezar a trabajar el cuerpo.

Vaciado del cuerpo

Para vaciar el cuerpo usamos un taladro de columna pero antes, para hacer mas manejable el tema, hicimos un primer acercamiento al contorno del cuerpo.
Para ello trasladamos, como de costumbre, el contorno a la pieza final usando la plantilla que hicimos el primer dia.
Usando la línea central como referencia primero trazamos el contorno en ambos lados de la pieza y después, con una arandela de metal, lo volvemos a trazar dejando un margen de seguridad.

A continuación usamos una caladora para cortar entre el margen real y el margen de seguridad.
Al usar una caladora este margen es importante ya que la hoja puede doblarse un poco y cortar de forma oblicua y dejar una pequeña «falda» en la pieza. Estas imprecisiones las corregiremos ya con el fresado final y lijado.
Como siempre, en las zonas de curvas mas pronunciadas, haremos unos cortes en el radio de las mismas.

Con esta primera aproximación al contorno ya hecha fuimos al taladro de columna, lo equipamos con una broca Forstner y empezamos a vaciar la zona que irá hueca.
En este proceso no iremos a la profundidad final aun, ya que luego acabaremos con un fresado que lo dejara mas limpio y eliminará las marcas de la broca.

Con este proceso hecho, quedaba pasar de esa colección de taladros que parecían un queso Gruyere a dejarlo mas limpio y para eso pasamos a trabajar con formón y maza.
Reconozco que tenía muchas ganas de aprender a trabajar con formón. Cuando veia videos de gente trabajando con ellos y los acabados que se consiguen es una maravilla, así que por algun lado tenia que empezar.
Siempre vigilante de por donde va la veta de la madera y con mucho cuidado, a desbastar todo con el formón y a limpiar lo máximo posible siempre pensando que acabaremos el trabajo con la fresadora para un acabado pulcro.

Y aquí lo dejamos por esta vez. En la próxima sesión de trabajo ya acabaremos la cavidad del todo.
No me resisti a poner la tapa encima para ir viendo como queda el conjunto.